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domingo, 13 de mayo de 2012

Capítulo 3: Algo especial...

Me coloqué en una esquina del pasillo para pasar desapercivida "Qué verguenza, por dios", la única frase que rondaba mi mente. Pero no pude disfrutar mucho de la soledad hasta que llego Lionel.

-¡Pero qué haces ahí tonta! Ven, te enseñaré mi habitación. 

Y me agarró la mano, obviamente para llevarme a su cuarto, y me percate de algo extraño... "¿Se cuida las manos?". Sea lo que sea, son muy suaves.

No esperaba menos de su cuarto, amplio, con balcón, como el mío y luminoso, con azúl en las paredes, pero un azul aguamarina un poco más clarito, precioso. Con la gigante tele y al lado la play 3, y como no, el típico juego de todos los tíos; el Call of Dutty. Me sorprendió que no fuera un cuarto tan juvenil. Pero obviamente ya no tiene 15 años, tiene 21, y eso por general significa un aumento de madurez en ese sentido.

-Siéntate aquí- Me dijo.- Te gusta mi cuarto, ¿eh?. Lo tengo bien cuidado, ya no soy el común adolescente de 15 años que lo deja todo por el suelo...

- Ya lo veo. - sonreí.

- ¿Algún día me enseñarás la tuya? El otro día la vi muy bonita cuando fui a saludarte "vecinita" - Sonrió. Y de nuevo dejó todo atrás con esa agradable sonrisa.

- ¡Si, claro! Cuando quieras... Menos comida tiene de todo. - Reímos los dos.

- Cuando era pequeño, solía venir aquí a ver a mi padre en verano durante un mes, y esa casa siempre ha estado vacía. Una vez entré porque se había colado el gato y soñaba con que cuando fuera mayor, viviera allí una chica hermosa que me enamorara con su simpatía. ¿Coincidencia?

- Vaya, pues te habrás llevado un fiasco al verme... - Rió de nuevo


- Para nada, al contrario.

-Cosas de niños... - Sonrió cuando hice ese comentario.

Pero ¡¡¡¡¿qué me quería decir con eso?!!! ¿Acaso le gusto? ¡Ay, madre mía!

Por fín llegó el momento de romper ese incomodo silencio con la típica frase que me recordó a mis padres cuando me pasaba horas y horas en el ordenador hablando con mi ex novio... "¡A cenaaaaaaar!"
Marchamos de su cuarto para sentarnos en la mesa, yo estaba indecisa porque no sabía cual era la forma de comer de ellos, así que pensé en acomodarme a su forma. 
Volvió el silencio espantoso hasta que el padre pronunció unas palabras con las que en comparación, hubiera preferido el silencio incómodo durante toda la velada. 

- ¡ Y qué hijo! ¿Ya te gusta la chica? Es guapa ¿eh?


Lionel empezó a ponerse rojo en respuesta a ese comentario tan inoportuno y se ahogó con la carne que estaba masticando. 

- ¡Pero que dices papá!

Hice que reía pero no me hacia mucha gracia. Por una parte ahora se me habia quitado ese remordimiento con el comentario anterior, pero esa respuesta me habia molestado un poco...

"¿Por qué me dice eso a mí, y luego lo niega?"

Terminamos de cenar y marchamos a mi casa pues él estaba convencido de que me acompañaría hasta mi cama y me daría un beso en la frente en señal de buenas noches... ¡El muy payaso! 

- ¿Quieres que me vaya? - Dijo él, con un tono tímido.

- No, no.. Pasa, no pasa nada.

 Ésta vez fui yo la que lo agarró para entrarlo hacia adentro. Sé puso rojo y con la otra mano se volvió a frotar el pelo apartando la mirada. Con este gesto me demostró que lo hace por un ataque de vergüenza.
Le enseñé toda mi casa, con lo cual se quedó con la misma cara que yo al principio: Boquiabierto. Nos sentamos en mi cama y comenzamos a hablar de nuestras cosas del pasado. Y a él le apeteció hacer preguntas por doquier, como si de un interrogatorio se tratara.

-Ahora me toca hacerte una pregunta y tu debes responderla como yo he hecho con las tuyas, luego puedes seguir preguntándome, ¿Vale? Bien. - No le dejaba hablar, necesitaba saber la respuesta, aunque la pregunta fuera tonta. - ¿Eres virgen?

Ésta vez el silencio hacía hasta daño en los oídos, el no dejaba de frotarse el pelo y reírse, y llego el momento de la respuesta.

-Si. - Dijo avergonzado.

¿PERO COMO PUEDE SER ESO? ¡¡CON 21 AÑOS!! Eso era lo único que pasaba por mi mente.

- No se lo digas a nadie, Liss, por favor.

- Tampoco conozco a nadie. - Rió, aunque con vergüenza, pero rió.

-Continúa. De todas maneras no me sorprende.

-¿No te sorprende? Lo sé.. Soy tímido. -Hizo una pausa sonriendo y continuó con sus preguntas. -¿Tus dos padres trabajan?

- Sí, se conocieron en el primer año de carrera.

-¿Qué estudiaron?

- Los dos estudiaron derecho, pero mi padre se especializó en juez y mi madre se quedó abogada.

- ¡Vaya! - Un pequeño silencio pasó por al lado nuestro pero no tardó en romperlo. - Y por esta casa, supongo que cobrarán bastante, ¿no?

-Sí, gracias a dios nunca nos a faltado de nada. Pero no te confundas por ello. yo no soy una de esas niñas de mamá y papá que lloran porque se me ha roto una uña.

- Eso me agrada, chicas como las que tu has descrito han pasado muchas por mi vida, y de verdad, no te las aconsejo.

- Gracias por cambiarme mi identidad sexual.- Rió.

- ¿Has venido hasta aquí solo por estudiar?

- Vaaaale, me has pillado, eres listo.. ¿eh? La verdad y por decirlo de alguna manera, estudiar aquí era... ¿Cómo decirlo? Un sueño "platónico", es decir, imposible. Pero digamos que algunas cosas me enpujaron a cumplirlo, y ese último empujon, me lo regalaron mis padres por mi vijesimo primer cumpleaños. Un boleto de ida, unas llaves de una casa y una tarjeta de crédito.

- ¿Qué tipo de cosas te empujaban?

- Pues que me había quedado sin amigas. Bueno "amigas".- hice el gesto de "entre comillas" con los dedos.- Porque cuando lo dejé con mi ex, perdí completamente la popularidad y ellas se marcharon de mi lado...

- ¿Tu ex también es uno de tus empujones?

-¿Sinceramente? Si... Porque fue muy dura la separación, y más aún el daño que me había hecho...

-¿Qué te hizo?

- Creía que era diferente...- Un nudo se acopló en mi garganta, pero yo logré ocultarlo. - Me ilusionó por completo, despues de tres años de amor y sinceridad. Pero me di cuenta de que me estaba engañando, desde el primer año... Con una de mis amigas.

-Uf... Lo siento. - Se volvió a frotar el pelo...

- No pasa nada, ya es pasado.

Volvió ese jodido silencio hasta que...

- Hoy me has hecho pasar un día estupendo.- Dijo él avergonzado.

Yo no podía soltar palabra después de aquella frase y él solo se dedicaba a mirarme a los ojos, sonriendo, como siempre ("qué fastidio"). De repente, como si me estuviera buscando, su meñique se encontró con el mío, y se enlazaron. Pero él cogió fuerzas y me agarró la mano completa. Sus manos calientes y suaves me calmaban, pero aún así, la euforia me comía poco a poco por dentro... Y empezó a acercarse...

Continuará.
-o-

¿Qué tal? ¿Os ha gustado? Dejadme un comentario con vuestra opinión. Estamos para mejorar.
Por favor comentad, quiero cambiarle el pelo a rubio a Liss, ¿qué me decís?

5 comentarios:

  1. Guau! ME ENCANTA!!! (y me gusta aun más porque has usado dos imágenes de 1D) xD
    Sube el siguiente ya!!!

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  2. Me alegro tanto de que te guste!♥ jaja muchísimas gracias por leer :) un gran beso.. cotidianos!

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  3. Ha estado muy bien, y lo has dejado en el peor momento!!! argh xD espero el siguiente =)

    http://leyendasveladas.blogspot.com.es/

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  4. Sube el siguiente pronto! me encanta:)

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  5. Tranquilas! Mañana lunes subiré tres capítulos! es que con esto de los exámenes no hay tiempo de nada... -.- En fin! espero que os paseis mañana <3 un beso enorme♥

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